Así lo afirmó el titular del Instituto Argentino de Análisis Fiscal, Nadin Argañaraz, quien además puntualizó que “para el Gobierno, el año que viene es clave el tema de ingresos”, máxime que no va a tener el Impuesto País.
El doctor en Economía, consultor económico y presidente del Instituto Argentino de Análisis Fiscal, Nadin Argañaraz, se refirió al gasto público, con especial énfasis en el renglón jubilatorio, al tiempo que evaluó que la recesión “ya terminó”.
“El gasto jubilatorio es el principal en la Argentina. Alrededor del 40 % de lo que Argentina gasta por año es en jubilaciones y pensiones. Y en el último trimestre del año va a registrar un aumento del gasto respecto al último trimestre de 2023”, indicó.
En tanto, precisó que “durante estos diez meses del año el gasto vino cayendo respecto al año pasado y esa fue la tercera parte de la reducción del gasto que estaba explicada por la caída del gasto en jubilaciones. Pues eso va a cambiar, a mi criterio, en el último trimestre y también en el año 2025”.
“Se estaría hablando de un gasto que el año que viene podría crecer un 6 %, es el gasto en jubilaciones, en términos reales respecto a este año”, acotó el economista en declaraciones a CNN Radio.
La baja del gasto en jubilaciones de 2024 y la suba esperada para el gasto en jubilaciones de 2025
De cumplirse con el cierre fiscal 2024 previsto en el Proyecto de Ley de Presupuesto 2025, el gasto primario real terminaría 2024 con una caída real interanual del 26,7%. Dada una… pic.twitter.com/eUepMcTKL8— Nadin Argañaraz (@NadinArganaraz) November 7, 2024
De todos modos, manifestó que “obviamente se va a confirmar esto del último trimestre del 2024. Va a haber mayor gasto, con lo cual, el Gobierno seguramente hará calibrar el resto de los gastos de modo tal que el aumento esté por debajo del aumento que tenga la actividad económica”.
“Para el Gobierno, el año que viene es clave el tema de ingresos. No va a tener el Impuesto País, lo cual es una plata significativa que inclusive era no coparticipable, o sea que la administraba directamente el Gobierno nacional”, anexó.
En relación a los salarios, aseveró que “si uno analiza el presupuesto, el Gobierno espera compensar eso con un aumento de la recaudación relativa de derechos de exportación y de combustibles, principalmente. Pero eso de combustibles para que se dé, debiera seguirse sincerando el impuesto nacional, que es en pesos, que se deteriora con inflación. Y el Gobierno a principios de año lo sinceró, pero luego eso se paró”.
No obstante, pese a que haya una mejoría de los salarios, advirtió que “estamos prácticamente un 40 % abajo del poder adquisitivo del año 2017, saliendo de una caída aún mayor que se tuvo en febrero de este año”.
El consultor económico agregó que, en materia salarial, el mas perjudicado es el sueldo de los trabajadores públicos, “que de alguna manera es un reflejo de este cambio económico que se está dando en materia de participación del gasto del Estado”.
Explicó que “una fuerte caída de gasto significó una caída de ingresos, no solo a nivel nacional, sino también provincial y municipal, que llevó a una caída del poder adquisitivo del empleado público”.
Sobre los datos de crecimiento en la construcción y la industria, el presidente de IARAF consideró que la recesión termino y “que la economía tocó piso en el segundo trimestre del 24, y ha empezado a tener una mejora muy leve, que debiera irse consolidando, y el año que viene debería tener, en la medida que no surja ninguna cuestión no prevista, al menos un aumento de actividad del orden del 3,5 por ciento”.
Buenos Aires BA /ANI