El gobernador recibió a 42 jefes comunales en una reunión privada en su residencia. La vuelta de la reelección indefinida y las opciones para los comicios “a dos bandas” fueron el tema excluyente.
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, recibió hoy en su residencia en el centro platense a 42 intendentes del conurbano y el interior bonaerense, con los que mantuvo una reunión privada con un tema excluyente: las elecciones.
Durante dos horas, a partir de las 15, el mandatario departió con jefes comunales peronistas de toda la provincia, entre los cuales se encontraban Fernando Espinoza, de La Matanza; Juan José Mussi, de Berazategui; Jorge Ferraresi, de Avellaneda; Julio Alak, de La Plata; Fabián Cagliardi, de Berisso; Mario Secco, de Ensenada; Gustavo Cocconi, de Tapalqué; Francisco Echarren, de Castelli; Germán Lago, de Alberti; Gastón Granados, de Ezeiza; Gustavo Barrera, de Villa Gesell; Alfredo Fisher, de Laprida; Alejandro Acerbo, de Daireaux; Federico Achával, de Pilar; Ricardo Moccero, de Coronel Suárez; Lucas Ghi, de Morón; Andrés Watson, de Florencio Varela; Luis Pugnaloni, de Hipólito Yrigoyen; José Nobre Ferreira, de Guaminí, y Ricardo Alessandro, de Salto.
Por el gobierno participaron, además de Kicillof, la vicegobernadora Verónica Magario; la secretaria general de la Gobernación, Agustina Vila; la jefa de asesores del gobernador, Cristina Álvarez Rodríguez, y los ministros de Gobierno, Carlos Bianco; de Economía, Pablo López; de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque, de Trabajo, Walter Correa, y de Infraestructura, Gabriel Katopodis.
Un tema central del encuentro fue la idea de volver a reformar la ley para que se pueda habilitar la reelección indefinida de los intendentes y legisladores, algo que había sido vedado por una norma impulsada por la entonces gobernadora María Eugenia Vidal y que fue parcialmente modificado para las últimas elecciones intermedias. Se pudo saber que una gran mayoría de los jefes comunales apoyan esa modificación y que desde el entorno de Kicillof están seguros de que impulsarla no implicará un costo político para el gobernador.
Las complejidades del panorama que se presentará con la coexistencia de dos sistemas electorales en los puntos de votación (boleta única de papel, BUP, a nivel nacional y boleta múltiple partidaria para los cargos provinciales) fue otro tema que se llevó buena parte de la atención, ya que supone tanto problemas de logística (como la duplicación de urnas y de actas, además de la habilitación de distintos lugares para votar a la vista de las autoridades de mesa, en el caso de la BUP, y fuera de su vista, en el otro) como en la militancia y promoción de los candidatos.
“Esto cambia toda la mística de la campaña”, dijo un jefe comunal que participó del cónclave. “Si fuera por mí, cierro la persiana en mi distrito, me quedo con mis votos y que los demás hagan lo que puedan; pero la verdad es que complica todo.”
Redacción: Buenos Aires BA / www.buenosairesba.com.ar
