El canciller ratificó que el país no impulsará la firma del convenio, y aclaró que deberán resolverse algunas diferencias porque las condiciones provocaban un impacto “negativo para la industria y en las exportaciones agropecuarias” al país.
“La Argentina siempre propuso durante nuestra gestión que el acuerdo se debía reabrir por el impacto negativo sobre exportaciones agropecuarias y la industria. Hubo una negativa de la UE. Lo trabajó la Argentina prácticamente en soledad porque había cambio de gobierno en Brasil y Paraguay, y Uruguay tiene una posición distinta”, repasó.
El presidente Alberto Fernández remarcó ayer que el acuerdo entre el Mercosur y la UE aún no se había firmado porque “encontró resistencia dentro de Europa” y, si bien manifestó su intención de suscribir ese convenio, llamó a debatir primero “determinadas condiciones que permitan sostener y hacer crecer nuestras industrias”.
Consultado por el conflicto en Medio Oriente, Cafiero ponderó que, durante la tregua de la semana pasada, se “permitió el alto al fuego, la entrada de ayuda humanitaria para Gaza y la libración de rehenes”.
“Logramos que muchos rehenes argentinos fuesen liberados. La Argentina sigue reclamando la liberación de todos los rehenes, especialmente los connacionales. Seguimos pidiendo a Israel que vuelva a una mesa de negociación, se logre una nueva tregua y se consiga liberar a todos”, completó.